El tiempo y el espacio del taller de lectura plasmado para:



leer de diferentes maneras (por arriba, por abajo, entre líneas, a fondo, participando del texto, recreándolo),



dar cuenta de los procesos culturales en que surgen y son comprendidas o cuestionadas las obras literarias,



pensar (discutiendo, asombrándose, dejándose llevar por lo que los textos nos dicen -pero parece que no dijeran-),



y por sobre todas las cosas, y siempre, disfrutar de la buena literatura.








jueves, 2 de diciembre de 2010

Sobre "Bartleby", y "La tercera margen del río"

Más que las respuestas, quizás importan las preguntas que funcionan como disparadores; por eso aquí van algunas:




Sobre Bartleby:

Sabemos que Bartleby es "pálidamente pulcro, lamentablemente respetable, incurablemente solitario".

¿Es como las cartas perdidas de la Oficina en que trabajaba antes: "cartas que se dirigen a la muerte..."?

¿Es el alienado por la sociedad capitalista que representa el abogado de Wall Street?

¿Es un líder de la resistencia pasiva, es un líder de la libertad, un sobreviviente de algo terrible?

¿Y no es también el impresionante  efecto que produce en el abogado, cómo le devuelve algo de humanidad, cómo lo conmueve...?



Sobre qué es La tercera margen,  el cuento de Guimaraes:
(No dejen de ver la intertextualidad con el cuento  Wakefield, de Hawthorne, que vimos hace poco, en cuanto a la partida aparentemente absurda,)

¿Es la canoa, es decir el invento del padre para no quedarse ni cerca ni lejos de su familia?

¿Es el hijo que queda preso en el medio, en otra tercera margen, entre la decisión del padre que toma un camino (el río) y la de su familia que toma otro (otro pueblo)?

Ese estar “en el medio”, ¿es también hasta el mismo lugar del autor ("mediador", diplomático)?

En el cuento hay al menos cuatro interpretaciones sobre el enigma de la partida del padre:

1) locura;

2) el pago de una promesa;

3) una enfermedad como, por ejemplo, la lepra;

4) el padre es el profeta de un apocalipsis (como Noé con su arca). Hay alguien que sabe en el texto, es decir, la verdad está allí. Pero ese “alguien”, ese personaje, está muerto: el fabricante de la canoa.


¿Y si la tercera margen es la del “río adentro”, o sea el río mismo?

Se sigue poniendo interesante, lo vemos el lunes.

1 comentario:

  1. A MIS COMPAÑEROS DEL 2010 DEL TALLER DE GRACIELA


    Quería decirles que he disfrutado tanto de BARTLEBY y también de este año que voy a intentar expresarlo de otra manera. 2010 AÑO de lecturas compartidas. Soy lector, me considero un lector y además de eso un buen lector. La inquietud y la curiosidad me llevan por mis propios caminos por los que transito muchas veces maravillado de los descubrimientos que voy haciendo, y si hago éste prólogo de la forma en que lo hago es para resaltar la importancia de la lectura compartida. La lectura compartida tiene algo de chicos o de infancia. Yo lo siento así cuando por ejemplo las voces de tal o de cual (Yo siempre prefiero escuchar) me lleva con su cadencia a sensaciones nostálgicas que no recuerdo, pero que de alguna forma debo de haber pasado en mi niñez. El taller de lectura tiene una “temperatura” de confort que la sostienen las voces al leer y los aportes constantes durante cada lectura de Graciela, nuestras preguntas y el propio debate de cada pausa. Qué importante que es esto. Hay veces que los comentarios “abren” tantas puertas que uno cree que todo lo que está en la “casa” va a ser llevado por la corriente de ideas que van surgiendo. ¿Y el trabajo previo? Esas opiniones, esas citas, esos giros del pensamiento que nos desarman los preconceptos con los que uno anda por lo que escuchó, pispeó, o apenas entrevió del autor de turno… esas “pistas” que hay veces que no llegamos a comprender totalmente, pero que al menos sí intuimos. Eso, eso es la dedicación de QUIÉN modera el taller para con nosotros.
    Por eso gracias Graciela y gracias a todos, porque los textos y las lecturas “aburridas” como BARTLEBY Y COMPANIA han dejado de serlo.

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